A lo largo del lado suroeste del pórtico se encuentra la base de una estatua (de las muchas que también adornarían esta zona) con un epígrafe muy interesante. En efecto, en él aparece el nombre de un célebre pantomima del siglo III d.C., Marco Septimio Aurelio Agripa, liberto de Caracalla, a quien un admirador, Publio Albucio Apolonio, que dice ser milanés (mediolanesis ex Italia), había erigido un retrato-estatua.