El sucesor de Tutankamón, Ay, ataviado con una piel de leopardo y el Khepresh, realiza el ritual de apertura de la boca sobre el cuerpo del rey representado como un Osiris; en el centro, Tutankamón, ataviado con peluca, diadema, gran collar usekh y falda blanca, se encuentra ante la diosa del cielo Nut, que le da la bienvenida a la Duat.